Originally posted by winly9@Aug 21 2007, 09:56 PM
Pues yo también estoy a favor de que adopten. No creo que tener dos mamás o dos papás influya negativamente en el niño o la niña. De todas formas, esos niños van a estar mejor así que en un orfanato.
[snapback]195431[/snapback]
[/b]
Totalmente de acuerdo.
El problema no es que tengan dos padres o dos madres. Lo que cuenta es la educación que reciba el niño o la niña, hay muchos matrimonios heterosexuales en los que la educación que reciben los hijos deja mucho que desear, pero nadie protesta (a no ser que sean casos extremos de dejadez, maltrato o abandono).
El niño puede crecer perfectamente si la educación que recibe es buena. Y si una pareja homosexual, con los grandes problemas que les supone y demás, quieren adoptar, es porque de verdad desean tener un hijo y cuidarlo, educarlo, porque quieren lo mejor para ese niño. ¿Por qué tenemos que prohibir a dos personas que desean cuidar a un niño pequeño que lo adopten y lo hagan? El problema no es de ellos, joder, el problema es de la sociedad que presume de pensamiento liberal y se quedó estancada en la intolerancia y en la incapacidad de aceptar algo nuevo porque no lo consideran "natural", porque les asustan los cambios y se aferran a la tradición y a lo que ha estado ahí toda la vida, importe o no si es lo correcto.
También se apoyan los que están en contra que el niño lo pasará mal porque sus amigos se meterán con él en el colegio y demás. Los niños, cuando son pequeños, aprovechan cualquier diferencia para atacar a otros, es así: sea más gordito, más alto, más delgado, más inteligente, haga mejor alguna cosa, que no le guste hacer lo que todos hacen... Es igual como adoptar un niño negrito, por ejemplo. ¿Que lo pasará mal? Si no fuera por su color de piel, lo pasaría mal por otra cosa si es diferente. Pero una vez crezca, las cosas cambias. Menos los gilipollas de turno que siempre estarán, pero de nuevo, como los niños, esos atacan a cualquier cosa que es diferente. Y a ese tipo de gente, una vez ya se crece, se aprende a que no hay que hacerle caso.